Se que hace mucho tiempo que no escribo, la verdad es que no tengo ya ni tiempo ni ganas de hacerlo, pero hoy al ver esta noticia en el Diario de Burros y sus correspondientes comentarios del lector medio de dicho periódico, he decidido salir del ostracismo y decir tres o cuatro cosas:
Esto lo habéis generado desde un principio vosotros, los conductores y los peatones que os creéis dueños de la ciudad y a los que os sube la bilis mañanera por la garganta cuando leéis noticias sobre bicis en la ciudad.
Vosotros encendisteis la mecha, y luego os extrañará que os explote en la cara.
Hasta la próxima.
- Como ciclista estoy hasta las narices que al circular por la calzada los coches me piten, o me rebasen rozándome con el retrovisor aún yendo pegado al borde derecho, cuando mi derecho es ir por el centro del carril.
- Como ciclista, estoy hasta las narices de que el carril-bici esté atestado de viandantes con carritos de la compra, carritos de bebes y señoras con tacones, y que encima me recriminen el hecho de decirles que por favor se aparten.
- Así que como ciclista, si quiero pasar un paso de peatones montado o circular por una acera de más de 4 metros de ancho, a una velocidad consecuente respecto a la cantidad de peatones que haya en ese momento, llegando a bajarme si no me queda otro remedio, LO HAGO.
Esto lo habéis generado desde un principio vosotros, los conductores y los peatones que os creéis dueños de la ciudad y a los que os sube la bilis mañanera por la garganta cuando leéis noticias sobre bicis en la ciudad.
Vosotros encendisteis la mecha, y luego os extrañará que os explote en la cara.
Hasta la próxima.